Interpretación
La canción 'Zeit zu leben' de
Reinhard Mey trata sobre la fugacidad de la vida y la importancia de aprovechar el momento y vivir realmente, en lugar de dejarse detener por el miedo e la incertidumbre.
En la primera parte de la canción se mencionan varios símbolos de seguridad y estabilidad, como 'Una casa y seguridad, Un anillo por la eternidad, Una persona que siempre permanece, La razón para siempre'. Estas cosas, que a menudo se consideran signos de estabilidad y control, son cuestionadas: '¿De qué tenemos tanto miedo?'
En la siguiente parte de la canción se trata la insatisfacción y desesperación que pueden resultar de este miedo: 'Una sonrisa que no es sincera, Una mirada que no comienza nada, La mano que solo toma, Y el tiempo que se escapa rápidamente'.
El estribillo 'Y el viento arrastra todas las hojas, Y la muerte es más que una palabra. Porque nada permanece, nada permanece, nada permanece. Ningún anillo, ningún oro, ninguna pena. Nada permanece, nada permanece, nada permanece.' es un recordatorio de la fugacidad de todas las cosas, incluyendo las cosas que a menudo consideramos duraderas.
La tercera parte de la canción anima al oyente a concentrarse en el aquí y ahora y dejar ir sus miedos: 'Mi pasaporte me dice 'soy', La cuenta me dice 'tengo', Las fotos y el niño muestran que siempre estuve aquí. Todo lo que tengo me pertenece.' y 'Nada más que dolor' dice el miedo, 'Nada más que miedo' dice el dolor, 'Aférrate a ello' dice la cabeza, 'Déjalo ir' dice el corazón, Y el amor dice suavemente 'ahora y aquí'.
La canción termina con el llamado a aprovechar la vida: 'Es hora de vivir, finalmente tiempo. Tiempo de vivir, finalmente tiempo. Es hora de vivir, finalmente tiempo. Tiempo de vivir, finalmente tiempo. Tiempo de vivir.' Esto es un estímulo para disfrutar la vida al máximo y aprovechar el tiempo que se nos ha dado, en lugar de desperdiciarlo con miedos y preocupaciones innecesarias.